Sí, chavales, me han trincado. Se acabó el rollo.
El otro día recibí una citación para que hoy vaya a comisaría a declarar por fraude. Me dije -Dios, ¡pero si es imposible que me pillaran con aquella mierda!- pero así es.
Total, que han intentado asaltar mi casa... aquí podéis ver una foto que tomó el vecino cotilla de la casa de al lado (el cabrón siempre me está dando por culo):
Y nada, me he tenido que liar a hostias con los GEOS de los cojones. Creedme, noquear a un tío con casco y chaleco de kevlar es jodido. Al final he conseguido rechazarlos... incluso tiraron botes con gas, pero no sabían el aguante que he llegado a tener gracias a las cebollas viejas del Mercadona.
Finalmente me entregué; creo que tampoco hubiese sido necesaria tanta resistencia.
Resulta que no iban a por mí, solo querían que fuera a declarar a comisaría. Por lo visto un estafador ha estado intentando vender casas que no son suyas diciendo que habían sido embargadas y cobrando sumas por adelantado.
El cabrón está en la cárcel, pero yo tengo que declarar que no lo conozco y que tampoco le he dado permiso a nadie para vender la casa, porque una de las casas que estaba vendido el hijoputa era la mía.
A las 11 tiro para comisaría.
Les voy a decir que no pienso abrir la boca o firmar un mojón sin hablar antes con mi abogado. Me acojo a la 5ª enmienda, y me la suda si es americana, en la tele siempre lo dicen y funciona, ¿no?
Así, to chulo, a ver con qué me salen.
ea.
este post tiene ciertas partes que están un poco exageradas, pero ha sido para darle algo de emoción a la historia, que es totalmente cierta.
